"Si te vienes conmigo pararemos a la vera del camino para ver los arboles vestirse de hojas.Si te vienes conmigo volaremos confundidos entre jilgueros y rosas. Quiero un amor que cubra con teja de cañón esta descubierta. Un amor perdido y dominguero que me abra los ojos y cierre para siempre aquella puerta. Si te vienes conmigo partiremos sin destino hacia algún lugar perdido. Seremos ácratas de bajo consumo. Devoradores de libros de bolsillo. Literalmente. La rosca desgastada del beso de tornillo. Instalados en un tiempo variable, por hablar, no hablaremos mas. Viviremos pletóricos en cincuenta metros cuadrados. Hipotecados. O realquilados. O mejor, saltando, el que pudiendo quisiera, en zig-zag. Inmoderados. O moderados. O inmoderadamente moderados. O moderadamente inmoderados. O inmoderadamente inmoderados.” MANOLO GARCIA

FICHA TECNICA : Titulo original: La Science Des Rêves Director/guión: Michel Gondry / Productor: Georges Bermann / Fotografía: Jean-Louis Bompoint / Música: Jean-Michel Bernard / Montaje: Juliette Welfling / Efectos especiales: Jean-Gabriel Saint-Paul / Intérpretes: Gael García Bernal (Stéphane Miroux), Charlotte Gainsbourg (Stéphanie), Alain Chabat (Guy), Miou-Miou (Christine Miroux), Emma de Caunes (Zoé), Sacha Bourdo (Serge), Aurelia Petit (Martine), Pierre Vaneck (Mr. Pouchet)... / Nacionalidad y año: Francia / Italia 2006 / Duración y datos técnicos: 105 min. Color 1.85:1. Calificación IMDB: 7.6 / 10 SINOPSIS: Stéphanees un joven artista gráfico en cuyo cerebro se emite un programa de televisión en continua pugna con la realidad. Aterrizado en París con la esperanza de un buen trabajo y tras entrar en contacto con una nueva vecina, Stéphanie , la posibilidad de un romance se abrirá paso en su onírico universo de cartón. COMENTARIO: Francés, excéntrico y amigo de Björk, Michel Gondry tenía todos los números para convertirse en una sensación audiovisual, en uno de esos artistas hinchados por los medios de comunicación que, incapaces de superar la presión, se acaban hundiendo tras su primer éxito comercial. El fracaso de la infravalorada Human Nature confirmaba de pronto esta tesis. El mayor realizador de videoclips de la década era incapaz de contar (igual de bien) una historia en formato largo. Gondry no lo creyó así, pero, mientras pensaba en su siguiente película, volvió al terreno seguro de los vídeos musicales. Filmó maravillas como “Fell in love with a girl” (The White Stripes, 2002) o “Star Guitar” (Chemical Brothers, 2002) e industria y público decidieron darle otra oportunidad. El director francés no la desaprovechó, Eternal Sunshine of the Spotless Mind (2004) se convirtió, merecidamente, en un fenómeno, en un filme de culto que reflotó la carrera cinematográfica de Gondry. Sus detractores tuvieron que callarse, pero buena parte de la crítica siguió dudando de su valía y atribuyó todos los méritos de la película al guionista Charlie Kaufman. Quizás harto de todo ello, Gondry decidió escribir su siguiente obra. Y el resultado fue esta Ciencia del sueño, la película más libre y deslumbrante de su corta trayectoria. Un film que aprovecha cada hipérbole de la imaginación del director para recordarnos que no se vive más amor que el primero: que a partir de ahí, todo lo demás no será igual y apenas comenzará a amontonarse, no se sentirá más amor que aquel, sentirse enamorado después no es menos que rememorarlo una y otra vez. Heredero indirecto de la puesta en escena de George Meliés, - Éste con su recordado Viaje a la luna de 1902 hizo tangible aquello de que el cine, más que una representación de la realidad, es también acto fantástico, mágico y explosivo de una ilusión, ilusión que por más de cien años aún nos inquieta y que hoy como otros viernes nos convoca - igual o más fascinado con el mismo juguete, Gondry hace las veces de prestigiador, mientras saca de su personal baúl de cachivaches ( lugar donde fácilmente abundan, metros de lana, muñecos con los ojos descocidos, botones perlados, papel maché y una jirafa de colores diseñada por un niño de 5 años) nos esta aduciendo que el amor es la mejor y la peor de las sensaciones, que cuando amamos a un cuerpo , a un tono de voz y a una manera de ser también “nos perdemos como personas y nos recobramos como sensaciones, [y] que a medida que la sensación se hace más intensa, [ese] cuerpo que abrazamos se hace más y más inmenso”. Bienvenidos sean, cultores, detractores y simpatizantes del séptimo arte, hoy con La Ciencia del sueño comenzamos este idilio .